A la hora de entrenar nos enfocamos en trabajar la zona abdominal, glúteos y piernas, y nos olvidemos de realizar ejercicios de pecho, pese a que es una de las zonas que más sufren los efectos del paso del tiempo, del embarazo, lactancia, menopausia, de los cambios hormonales...
Lo cierto es que hay dos aspectos a tener en cuenta: el primero es que el pecho se puede trabajar de maneras muy variadas, amenas; a todas nos gusta mantener esa firmeza en el pecho, lucir un bonito escote.
¿Qué ejercicios de pecho son mejores? Depende. Ten en cuenta que hay que individualizar a la hora de confeccionar rutinas, valorar factores como nuestro estado de forma, medios disponibles, posibles lesiones o patologías. Lo que le puede funcionar a una persona, quizás no le funcione a otra. Se debe tratar cada caso de forma personalizada.
Dedicar unos 15 minutos a los ejercicios para pecho.
Realizar tres series por cada ejercicio, de unas 12 a 15 repeticiones (y unos 30 segundos de descanso entre cada serie).
Combinar los ejercicios de fuerza con aeróbicos, de manera que nos ayude en la creación de músculo y la pérdida de grasa.
Realiza los ejercicios correctamente para mayor efectividad y reducir el riesgo de lesionarnos. Combínalos con una alimentación sana.