El jugo de tomate, un antioxidante por excelencia

El tomate (llamado en México jitomate) se incluye a menudo entre los alimentos que conforman una dieta para perder peso, esto se debe fundamentalmente a que posee una densidad calórica muy baja y bastante cantidad de fibra, lo cual permite inducir saciedad. Además en su composición contiene un elemento altamente antioxidante: el licopeno.  

Esta sustancia permite luchar contra la formación de radicales libres y ayuda a prevenir la aparición de enfermedades a mediano plazo.

Tomado regularmente y a primera hora, el jugo de tomate  ayuda a comenzar el día de la mejor manera. Eso sí, recuerda combinar el jugo de tomate con un desayuno variado y equilibrado. Es decir, no se trata de salir de casa con “este simple jugo”. Acompáñalo con algo de fibra, con la proteína de los huevos, por ejemplo, y alguna pieza de fruta, preferiblemente manzana verde.

Entre los beneficios del jugo de tomate se encuentra que ayuda a quemar grasa (uno de los objetivos fundamentales que buscan muchas mujeres), cubre las necesidades diarias de vitamina C, posee un alto contenido de fibra, lo que favorece el tránsito intestinal, además disminuye el riesgo de enfermedades cardiacas, es un diurético natural, junto a lo que ya sabes, es una gran fuente de licopeno, un antioxidante por excelencia.

No pierdas de vista que entre sus múltiples beneficios está el fortalecimiento del sistema inmunológico, previene enfermedades, pues contiene vitamina C y contribuye a evitar las infecciones, junto a ello propicia huesos fuertes.

Ayuda a la digestión por su alto contenido de fibra, además favorece la absorción de los nutrientes y es un aliado para regular los ácidos gástricos.

Tampoco puede descartarse que por tener vitamina A ayuda de manera considerable a proteger nuestros ojos, previene enfermedades degenerativas o la ceguera nocturna.

 

Aquí tienes una receta: coloca en el extractor de jugo seis tomates maduros, triturarlos completamente, agregar el jugo de medio limón, dos cucharaditas de azúcar, media taza de hielo y volver a licuar hasta que todos los ingredientes se integren.

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