El exterior, lo que está a la vista, importa, no por gusto le prestamos tanta atención, sin embargo no se puede descuidar el embellecer desde dentro hacia afuera... porque dice mucho de nosotras.
‘Nutrirse’ desde adentro hacia afuera es relevante, porque lo que se aprecia permite hacerse una idea más acabada de la mejor versión de cada una de nosotras.
Es relevante tener en mente actividades creativas, por un lado se ejercita el cerebro y por otra se le da rienda suelta a esas ideas que ‘bailotean’ y queremos materializar.
Conviene mantener una comunicación asertiva, quiere decir, tener la habilidad que permite a las personas expresar de la manera adecuada, sin hostilidad ni agresividad, sus emociones frente a otra persona, algo que tampoco se puede descuidar.
Recuerdas vestirte para ti y solo para ti, trabaja en lo relacionado con tu cuidado personal, sé feliz en tu propia piel.
Debemos tener siempre presente que una mujer femenina irradia siempre seguridad, es espontánea, tiene amor propio e independencia, y eso es fundamental, nos hace ver encantadoras a los ojos de otras personas, sin perder una pizca de feminidad.
Si no confiamos en la feminidad, no conseguimos expresarla más allá del ‘look’, llenarnos de ella es cuestión de actitud, debemos demostrar que nos queremos a nosotras mismas, sabemos manejar diferentes situaciones y mantener un equilibrio entre pensamientos y sentimientos.