El compositor mexicano Antonio Juan-Marcos y la escritora Mónica Lavín unieron su talento para crear la ópera “La sed de los cometas”, una puesta en escena que muestra los claroscuros de la “décima musa”, la poetisa Sor Juana Inés de la Cruz, que resuenan con problemáticas sociales actuales.
“Yo quería mostrar una Sor Juana a quien pudiésemos escuchar y casi que dialogar, no a una especie de monumento histórico que nada nos diga de nuestra propia sociedad”, cuenta en entrevista con Efe Juan-Marcos.
Desde su punto de vista, Lavín, quien fungió como libretista del proyecto y autora del libro “Yo, la peor” sobre Sor Juana, supo plasmar grandes injusticias de la época virreinal (1535-1821) que de cierta manera se mantienen en la sociedad actual.
“Mónica logró que se volviera un personaje que, al hablar de ella y de sus tiempos, nos hablara de nosotros, está claro que problemas como el racismo, el clasismo y la equidad de género son problemas que no se han resuelto el día de hoy”, menciona Juan-Marcos.
La ópera, que muestra la etapa más prolífica de la literata y también “su muerte intelectual”, se presentará en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) los días 30 de septiembre y 2 de octubre en el marco del Festival CulturaUNAM.
Esta no es la primera vez que Antonio se adentra al universo literario desde la música.
Antes, obras de escritores como Octavio Paz o Juan Rulfo ya habían detonado en él un impulso para componer como ejes rectores de su inspiración, y la posibilidad de abordar a Sor Juana era para él “un sueño guajiro”.
“Lo propuse sin ninguna intención de que esto encontrara un andamiaje, pero lo dije y les interesó y a partir de ahí se empezó a dar todo”, dice Juan-Marcos, quien trabajó en la composición musical por dos años.
Con esto, Antonio reitera su amor por la literatura y comprueba las coincidencias que tiene con la música.
“Para mí, siempre fue como la otra cara de la moneda, desde muy temprano empecé a tener un gusto muy fuerte por la literatura y siempre leía un poquito con la perspectiva de un compositor”, relata.
Según narra, cuando leía a Juan Rulfo (“Pedro Páramo”, 1955) encontraba en los libros “sonoridades murmuradas, de entresueños”, que trasladó en su obra “Tum/Tambor”.
Con Octavio Paz (“El laberinto de la soledad”, 1950), “la fuerza y el ímpetu” de sus palabras lo llevaron a hacer “Mi vida con la ola”, y aunque ahora es el turno de Sor Juana, para 2023 hará lo propio con el universo de Violeta Parra, que estrenará en Washington.
“Me imaginaba a Sor Juana soprano porque en los agudos podía expresar esta dicotomía, esta frustración entre ser y una sociedad que no quiere que seas”, considera el compositor.
Antonio espera que la ópera deje en quienes la vean ganas de transformar las dificultades impuestas por la sociedad, desde la responsabilidad.
“Espero que se logre trasmitir ese pensar de Sor Juana, que pudo entender las problemáticas de sus tiempos y pudo darle una solución, aunque no fue perfecta”, comenta.
SOR JUANA Y MÉXICO
Con José Arean frente a la Orquesta Juvenil Universitaria, Eduardo Mata y Cecilia Eguiarte como la soprano encargada de dar voz a la máxima exponente de la literatura hispanoamericana, la ópera también hace un retrato de México.
“Es una ópera que envuelve a México y a todas las mujeres mexicanas a las que no les hemos podido dar esa voz que merecen”, considera la cantante en entrevista con Efe.
Arean comenta que Cecilia siempre fue la primera opción para darle vida a esta mujer por el reto vocal que suponía y ahora que han comenzado los ensayos generales, ha constatado la gran fuerza de la ópera.
“Es una obra con un gran poder que va subiendo, termina en un momento importante que se trata del morir intelectual de la gran Sor Juana, una mujer brillante que como muchas en su época -y todavía en nuestra época- es reprimida, reprendida”, finaliza Arean. México (EFE)