Por Francisco ALEJANDRE
El precandidato presidencial Donald Trump ha dicho en su eslogan de campaña que lucha por hacer de los Estados Unidos un país mejor en todos sentidos: Make America Great Again. “Debería empezar por dar a sus trabajadores de Las Vegas la oportunidad de sindicalizarse y disfrutar de los beneficios que los miembros de la Union Culinaria tienen”, externó una de las cientos de personas que se manifestaron frente a la torre Trump International el pasado viernes 26 de agosto. Lo hizo a condición de que no se publicara su nombre, debido a las posibles represalias.
Como es sabido, trabajadores del Trump Hotel Las Vegas, votaron en una elección de la NLRB, el 4 y 5 de diciembre de 2015 en su hotel. Más de 500 empleados están en un bloque de negociación del sindicato y tenían derecho a voto. Esta victoria para los trabajadores, en un hotel de lujo, sin juegos de azar co propiedad del candidato presidencial republicano, Donald Trump y Phillip Ruffin, llegó nueve meses después de que los trabajadores en el Trump International Hotel de Toronto votaran para unirse a la organización sindical Unite Here, y una semana después de que los trabajadores de Trump Toronto ratificaran su primer contrato.
Los trabajadores de “Trump International Hotel Las Vegas” desean que su jefe inicie las negociaciones del contrato, después de ganar un voto sindicalización y luego de que el gobierno federal les negara la revisión de la apelación final. Trump Las Vegas tiene la obligación legal de negociar con los sindicatos de la culinaria y de camareros.
A la manifestación acudieron, además de los trabajadores, líderes religiosos, clérigos locales, simpatizantes y miembros de la unión culinaria. Su Secretaria Tesorera, Geoconda Arguello-Kline fue una de las oradoras del mitin y concedió entrevistas a los medios de comunicación que atendieron el rally.
