Tepesianos en las oficinas de El Mundo tras visitar Washington

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Por Roberto PELÁEZ

Mi nombre es Alessandra Nava, tengo 15 años, nací aquí, y dentro de tres años cuando tenga la posibilidad de votar tanto mis amiguitos como yo vamos a recordar a quienes nos dieron la espalda, a quienes de alguna manera contribuyeron a que nos separen de nuestros padres al terminar el TPS, en una posición que nos parece muy injusta.

Así se expresó recientemente la jovencita Nava en un encuentro con legisladores demócratas por el estado de Nevada, que tuvo lugar en Washington.

Dieron la cara, destaca la jovencita, la senadora Catherine Cortez Masto, además de los congresistas Dina Titus, Jacky Rosen y Rubén Kihuen; el senador Dean Heller envió a un asistente para que nos atendiera.

Maykel Deras, de 13 años, también acudió a Washington como parte de la delegación de tepesianos de Nevada. Fue la cuarta vez que los beneficiados por el TPS, nuestros padres, van a Washington, pero Heller no da la cara... 

El asistente nos habló de la firma del presidente Donald Trump para evitar la separación de las familias, casi nos pidió que le diéramos las gracias al presidente, comentó Deras.

Cuando concluya el TPS y le exijan a los padres que deben irse, eso también es separar a las familias, nosotros nacimos aquí, dijo Deras, tenemos derechos, sabemos lo que han trabajado y trabajan nuestros padres, lo que han aportado a este país, siempre han declarado sus impuestos.

Sin sacudirse el polvo del camino, los dos jóvenes, junto a Bliss Requa, Sandra Granados y Pablo Deras, visitaron las oficinas de El Mundo para ofrecer sus impresiones de la visita a Washington y sus pláticas con los legisladores.

No podemos quedarnos callados, resaltó Pablo, estoy en los Estados Unidos desde enero del 2000, tengo mi padre enfermo en El Salvador, prácticamente su única ayuda son las remesas, el dinero que le envío, agregó, y según el presidente pronto tenemos que irnos... no se me hace justo.

Durante todo esos años hemos pagado por el permiso de trabajo, por los trámites cada 18 meses, declaramos los impuestos, compramos casas y carros, contribuimos a la economía, somos respetuosos de las leyes, señaló con voz entrecortada el padre de Maykel Deras, quiero ver a mi hijo graduarse, ir a high school, a la universidad...

Por su parte Requa, ciudadana estadounidense, significó, estuve recientemente en El Salvador, le pedimos a los legisladores que no se limiten con ir a las fronteras, vayan a Honduras, a Nicaragua, a El Salvador, vean de cerca las condiciones de vida en aquellos países.

Entonces, añadió, cómo le vamos a pedir, a exigir, a los beneficiados por el TPS que dentro de pocos meses se vayan, se lleven a sus hijos ciudadanos americanos o los dejen, qué es eso, se preguntó; a los Estados Unidos, país de inmigrantes, ya ni lo conocemos.

Integrante del grupo llamado ‘TPS Nevada Camino a la Residencia’, Sandra Granados, trabajadora por 13 años del hotel y casino Wynn, destacó: me llena de orgullo escuchar a los más jóvenes, a nuestros hijos, quiere decir que ellos se suman a la batalla, toman el relevo, ya no somos solos nosotros.

Los amparados por el TPS, comentó Granados, no nos cruzamos de brazos, vamos a Washington, organizamos eventos, defendemos lo que nos parece justo, y vemos con optimismo que se unan los hijos, bilingües, estudiantes, con aspiraciones de ir a la universidad, corresponder a lo que nos ha dado este país.

Escuché lo que Alessandra dijo en Washington, sostuvo Granados, externó sus sentimientos, estoy muy orgullosa, hay muchos adolescentes y jóvenes talentosos entre los hijos de los tepesianos de El Salvador, de Honduras, Nicaragua.

Los visitantes precisaron que los legisladores escucharon los testimonios, supieron que muchos de esos jovencitos son víctimas de bullying, hicieron apuntes, y a la congresista Rosen se le salieron las lágrimas al escucharnos, coincidieron Alessandra y Maykel.

Queremos el apoyo de los demócratas y de los republicanos, que crucen el pasillo que separa sus oficinas, nos ayuden, apuntaron, no mendigamos, nuestros padres se lo han ganado con trabajo.

 

En la despedida, tanto Sandra Granados como Bliss Requa, precisaron, podemos vivir aquí con dignidad.

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