Semana Santa: Celebraron Vía Crucis en la iglesia Santa Ana

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Por Roberto PELÁEZ

En medio de la llamada Semana Santa tuvo lugar la representación del Vía Crucis en la iglesia Santa Ana, con la participación de jóvenes que caracterizaron a diferentes personajes -según los textos evangélicos-, además de centenares de feligreses que acudieron para orar y pedir a Dios padre piedad ante los difíciles momentos que se viven.

Como se sabe el Vía Crucis ofrece detalles de las etapas que vivió Jesús, el hijo de Dios, desde que fue apresado, sometido a juicio, hasta su cruxifición y sepultura, otras personas lo conocen también como ‘vía dolorosa’  en alusión a lo que sufrió durante todo el recorrido para la salvación de la humanidad... es un recorrido que llama a la piedad y la meditación por lo que tuvo que pasar y soportar Jesús, y las adversidades a lo largo de la vida, por su sangre y su dolor.

El patio de la iglesia Santa Ana (intersección de Maryland y la St Louis) se vio colmado de público; vengo todos los años, explicó Inés Vitela, de Michoacán, México, vivo aquí cerca, sobre la Exley, y siempre traigo a mis hijos, aunque he visto la representación varias veces no deja de estremecerme, sobre todo cuando María se arrodilla y pide misericordia por su hijo, significó. Siempre que veo esto, lo platico con mis hijos, la sangre de Jesuscristo, sus heridas.

Resulta aleccionador, destacaron ya dentro de la iglesia, primero ver todo lo que tuvo que sufrir Jesús para salvarnos, fue muy doloroso, sus pasos al calvario, recordar el camino que recorrió, y aquí vale reflexionar si solo clamamos a Dios cuando lo necesitamos... lo hacemos siempre, invocamos su nombre, o solo nos acordamos de Él cuando la situación es más difícil. Y la pregunta quedó en el aire.

Dios nos quiere tanto que envió a su hijo, a su único hijo, a convivir entre los hombres, a predicar, a pasar todo lo que pasó para lavar con su sangre nuestros pecados, trascendió.

Y María, como buena madre, de rodillas, hincada, pidiendo, alentando a su hijo; hoy podemos decir: madres, padres, platiquen con sus hijos, pídanle que se acerquen a Dios, que se alejen de las malas compañías... hijos, instaron, sean receptivos, amen a sus padres.

Siento algo que me aprieta el pecho, reiteró Vitela, sé que es una representación, pero también sé todo lo que pasó y sufrió el Hijo de Dios, agregó, por eso puedo decir ‘Creo en Dios todopoderoso’, y la forma en que Jesús enseñó a orar a sus discípulos, a los personas de aquella época, y también a nosotros. 

 

Jesús resucitó, explicaron, y en eso también hay una lección, para Dios no hay imposible, hay que dar gracias por lo que tenemos, orar a Dios en todo momento, alabarlo, agradecerle, sólo Él conoce los caminos de los hombres. Jesús vive, está entre nosotros, y nos ama.

 

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