Por Roberto PELÁEZ
Tras el impresionante impacto del ayuno en las proximidades del Capitolio, en Washington, y con el respaldo del pueblo estadounidense, no tengo dudas de que la Reforma Migratoria está cerca, ése es el objetivo primordial de nuestra lucha, afirmó a El Mundo Salvador Zamora, quien por dos semanas tomó parte en la acción.
De lo que se trata es de meter presión al Congreso, hacer sentir nuestra fuerza, lo que hemos logrado con el ayuno, ver la incorporación de tantas personas que estuvieron a nuestro lado, entonces ahorita no podemos bajar la guardia, hay que seguir adelante, insistir sin descanso en la reforma y el camino a la ciudadanía para 11 millones de hermanos que viven en las sombras, abundó Zamora, residente en Las Vegas.
El entrevistado, quien perdió 15 libras en dos semanas de ayuno, remarcó: el pasado jueves 12, Día de la Virgen de Guadalupe, fue una jornada histórica para las miles de personas que de una manera u otra intervinimos en este ayuno que devino acontecimiento, respaldado por miles.
Fuimos, algunos en sillas de ruedas, hasta la escalinata del Capitolio, escuchamos las palabras de aliento de Nancy Pelosi, líder de la minoría demócrata en la Cámara de representantes, después regresamos al sitio donde estaba el campamento de ayunantes, y fue realmente motivador escuchar las palabras del republicano Mario Díaz Balart y el demócrata Luis Gutiérrez, quienes coincidieron en que desde el mismo inicio del 2014 el tema de la Reforma Migratoria debe ser tratado con la prioridad requerida, pues es un tema que no admite espera y ha sido pospuesto, pero se acabaron las excusas, aseveró.
Antes de proseguir quiero dejar sentado que la visita de Dina Titus, congresista por el estado de Nevada, tuvo para todos, pero en especial para mi, expresó, una significación especial, lo mismo que las palabras de John Lewis, veterano luchador por los derechos civiles, compañero de Martin Luther King, quien nos instó a proseguir y no cejar hasta conseguir que se apruebe la Reforma.
Nos reconforta, apuntó, que en poco más de 30 días en el movimiento que se inició con el ayuno participaron alrededor de 10 mil personas, muchas se sumaron, nos visitaron, estuvieron un día, pero por encima de todo sentimos la solidaridad; ahora se ha decidido pasar a una segunda fase, con ayuno a nivel de comunidad, pues no podemos cruzarnos de brazos y esperar, puntualizó.
