Recién graduado... El sueño de Jordan Lozada

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Por Roberto PELÁEZ

El joven que tengo delante lo tuvo bien claro desde temprano. Sus metas están ahí, al alcance de la mano, a un tiro de piedra, como se dice, pero resta el esfuerzo final, y él sabe lo que desea, conoce sus retos y no se amilana.

Jordan J. Lozada sueña con trabajar en una empresa automovilística, en calidad de ingeniero mecánico, es más, quiere introducir sus innovaciones en los carros del mañana. Nada, que el entrevistado no se anda por las ramas, él no se pasa el día mirándose el ombligo.

“Ahora mismo, dice con orgullo su madre, aprovecha la ‘cuarentena’ para aprender a tocar guitarra, y está muy contento, se va a graduar de la Liberty Baptist Academy Clase 2020, fue elegido ‘National Honor Society’, además, durante sus estudios se distinguió como integrante del equipo de baloncesto, el de beisbol, y en drama”.

Jordan pone la guitarra a un lado y accede a platicar, “desde pequeño me atrae el mundo de los carros, comenta, la fuerza de los motores, qué papel desempeñan las bujías, todo me apasiona... iniciar los estudios de ingeniería mecánica es como un sueño, y lo que es mejor, voy a estar en la Universidad de Nevada Las Vegas (UNLV).

“Claro, como cientos, miles de jóvenes soñé con una ceremonia de graduación, terminar la preparatoria es como concluir el primer paso, o dar el paso inicial para hacer realidad los sueños; por esto del Coronavirus, añade, no podemos graduarnos como generaciones anteriores.

“De todas formas estoy muy contento, dice, orgulloso, aunque casi estoy al principio de un camino largo, pero graduarse es, en mi caso, resulta una manera de avanzar, de acercarse al objetivo principal que es graduarse de la universidad, terminar los estudios, conseguir trabajar por lo que uno estudió, de eso se trata”, enfatiza.

Optimista, con la energía que caracteriza a los jóvenes, amante de los deportes, Jordan no lo piensa dos veces cuando se abren ante él las posibilidades de jugar beisbol y baloncesto en la escuela, “eso forma parte de otros sueños, apunta, verme con la playera de la escuela, el uniforme de beisbol, defender los colores de la escuela, tomar parte en varios torneos, eso también es emocionante... no es como pasar por la escuela y hacerlo casi de manera inadvertida.

“Uno debe hacer suya la escuela, defenderla, representarla, ayudar en lo que sea posible, advierte emocionado, y yo juego mucho baloncesto... los deportes ayudan a crecer, contribuyen a la salud, uno aprende a jugar en equipo, a socializar”, argumenta.

 

Selene Lozada, la orgullosa madre, no puede mantenerse ajena a la conversación, y acota: “él tiene dos hermanos, no es el primero de la familia en graduarse de la preparatoria, apunta, pero igual está muy contento, y nosotros en casa somos muy felices”, remarcó sonriente. 

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