Por Roberto PELÁEZ
Es difícil ser artista y quedar impasible ante los encantos de la naturaleza, más aun si quien se muestra lista para mover de manera ágil sus pinceles es Ángeles Freire, una reconocida pintora mexicana asentada hace años en Las Vegas.
“Me alegra que mi arte sirva para ayudar a la gente”, reitera la artista, de esas que espera que la musa llegue y la encuentre trabajando, a veces delante de un grupo de niños, otras frente a adolescentes y adultos empeñados en ‘ver surgir’ el pintor que llevan dentro, y más reciente aun, junto a algunos de sus alumnos, en contacto con la naturaleza.
“Siempre digo que cuando enseñar es un arte, aprender es un placer”, comenta Freire, y acto seguido refiriéndose a sus estudiantes, advierte: “la imaginación es el principio de la creación; imaginas lo que deseas, persigues lo que imaginas, y finalmente creas lo que persigues”.
Se trata de lo que ella llama ‘Arte en libertad’, que, dice, ayuda a crecer como persona, además de contribuir a controlar la ansiedad, porque acota, este es un año de retos y no hay otra opción que enfrentarlos.
“Estos son, apunta, algunos de mis restos, enseñar, ver a los niños poner a un lado cualquier discapacidad y verlos aprender, pintar, combinar colores, ver las cosas tomar forma ante ellos. Lo importante es tener bien definida que a través del arte se puede ayudar a la gente.
‘Respecto a lo de pintar al aire libre, en contacto con la naturaleza, qué decir, hay que esmerarse en representar la serenidad, la belleza de un paisaje; algunos pueden esgrimir, señala, que sólo se puede pintar paisajes cuando una sale al encuentro de la naturaleza, pero mirando una foto también se puede lograr, aunque es importante tener esta vivencia.
“Estar junto a un lago, ver las montañas, los animales, los árboles, las nubes, sin dudas inspira, pero lo importante es aprender, ver que aflora la sensibilidad... experimentar la libertad de plasmar cualquier cosa es verdaderamente maravilloso”.
Con una facilidad pasmosa esta mujer mueve el pincel y todo va tomando forma. De Torreón, Coahuila, Ángeles nació para pintar... autodidacta por más señas. Es una artista de pies a cabeza, con todas las de la ley. Y ante ella, como ante la naturaleza, no se puede quedar indiferente.
