Por Francisco ALEJANDRE
La base del matrimonio de Consuelo y Miguel Corral está sustentada en el amor y el perdón. Hace un par de años celebraron sus bodas de oro y, una de sus mayores bendiciones -comentaron- fue el hecho de que el menor de sus hijos se dedicara al sacerdocio.
Michael Corral Monárrez fue ordenado como diácono, junto a Felipe Jiménez en solemne ceremonia realizada el pasado miércoles 31 de mayo en la iglesia Guardian Angel Cathedral.
También, el mismo día, se llevó a cabo la ordenación de dos nuevos sacerdotes con que contará la feligresía del valle son: Luis Nguyen Van Dam y José Unlayao, el primero de origen vietnamita y el segundo filipino.
La ordenación fue concelebrada por varios sacerdotes de la diócesis de Las Vegas, encabezados por el obispo Monseñor Joseph Pepe. La mayoría de los sacerdotes, como Manuel Quintero, Greg Gordon y Alberto Alzate, se sumaron a la alegría que impera en la diócesis con motivo del solemne acto.
“Que todos seamos uno al reunirnos en el banquete, uno en espíritu y verdad. Hoy nos has dado el pan para el mundo, que todos seamos uno en Cristo, que todos seamos uno en ti. Padre eterno, Padre fiel, tú que nos das la vida y la salvación. Nunca estamos solos, no nos abandonarás; tú nos amas con todo el corazón”, fueron las reflexiones de introducción, las que fueron precedidas por la liturgia de la palabra, curiosamente leídas en vietnamés, y basadas en Hechos 6:1-7b.
En la lectura, la elección de siete diáconos se resaltó que en aquellos días, como creciera el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos, de que las viudas de aquéllos eran desatendidas en la distribución diaria. Entonces los doce convocaron a la multitud de los discípulos, y dijeron: No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios, para servir a las mesas. Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo. Y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra. Agradó la propuesta a toda la multitud; y eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo, a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas, y a Nicolás prosélito de Antioquía; a los cuales presentaron ante los apóstoles, quienes, orando, les impusieron las manos. Y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.
En búsqueda del trabajo específico que realiza un diácono. Encontramos que es considerado un servidor, un clérigo o un ministro eclesiástico, cuyas calificaciones y funciones muestran variaciones según las distintas ramas del cristianismo. En la Iglesia católica se refiere así a aquel que ha recibido el grado inferior del sacramento del Orden Sagrado por la imposición de las manos del obispo, y por lo tanto se le considera la imagen sacramental de Cristo servidor, en virtud de la Sagrada Escritura que especifica: “Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos”.
Michael Corral, así como Felipe Jiménez, seguirán preparándose para -en el futuro inmediato- sean ordenados sacerdotes.
