Por Roberto PELÁEZ
Olivia Espinoza mira atrás, ha transcurrido más de una década desde que fundó la organización local ‘Azulblue Unidos por el Autismo’, y se muestra optimista.
“Somos, explica, una organización sin ánimo de lucro, por encima de todo constituimos una herramienta de inestimable valor para los padres con pequeños (as) afectados por esta condición que es el autismo.
“Comprendí hace mucho que los padres necesitábamos estar informados, conoce lo más posible sobre el autismo, estar en condiciones de ayudar a nuestros hijos, y eso por supuesto requiere informaci´pon precisa, actualizada, de ahí Azulblue y todo lo que llevamos a cabo”, afirma.
En la plática salen a relucir algunos nombres, indispensables para la labor que realizan “prefiero hablar del trabajo en equipo, de las actividades que mantenemos (y perfeccionamos) a lo largo de estos años, eso nos da prestigio, aparte de aprender, porque con el autismo siempre es preciso aprender, ser receptivos”, apunta.
Entre las actividades que acomenten los padres y personas allegadas a la organización, figuran:
Guía de Padres, que a decir de la entrevistada se materializa o realiza una vez al mes en línea; reunión de madres, también una vez al mes; reunión de grupos de adolescentes (se juntan una vez o dos al mes en diferentes locaciones.
“Que se formaran los grupos de adolescentes fue -y es- una excelente iniciativa, advierte Espinoza, también tenemos los grupos de niños pequeños, que al igual que los adolescentes se juntan en diferentes lugares de la ciudad para que puedan socializar, es algo a lo que concedemos especial importancia”, significó.
“Tenemos el ‘Max soccer camp’, lo hacemos en primavera y otoño al sur de la ciudad, en campos que podemos conseguir, y es también algo relevante ver la participación de los pequeños, ellos socializan, juegan, reciben sus premios”, resalta la fundadora de Azulblue.
“Recientemente, prosigue, entregamos juguetes a niños con autismo y sus hermanitos, los juguetes fueron donados por Toys for tots y Ackerman center.
Santa se tomó fotos con los niños, les ofrecimos pan dulce, champurrado y tamales.
“No quiero concluir, dice, sin agradecer a las personas o entidades que a lo largo de estos años nos han tendido la mano, nos han apoyado, muchas gracias”, concluyó.
