Cada migrante hondureño en los Estados Unidos sostiene en promedio a cinco personas en su país, afirmó la Fundación 15 de Septiembre al hacer un llamado al presidente Joe Biden para que conceda un nuevo TPS a una comunidad que es el motor económico de una Honduras en crisis y “aislamiento”.
Con ese dato, Juan Flores, presidente de la Fundación (sin fines de lucro), resaltó las consecuencias que tendría un regreso masivo de migrantes a su país si no pueden seguir aquí.
Para esas personas es para las que esta organización y el Gobierno de Honduras solicitan un Estatuto de Protección Temporal (TPS), independiente del que ampara a unos 57 mil hondureños, prorrogado hasta octubre próximo.
En una declaración leída en la rueda de prensa, en la que también participó la vicepresidenta y el director de Asuntos Migratorios de la Fundación, Maybelle Castillo y Jack McGuire, se pide al presidente Biden “darle trámite a la solicitud de un nuevo TPS para los hondureños, enviada por las autoridades de Honduras, a través del canciller Lisandro Rosales”.
La petición de un nuevo TPS se sustenta en la grave situación creada por los huracanes Eta e Iota, que causaron daños por unos 2 mil millones de dólares, más el Covid-19.
En Honduras “la economía está quebrantada y se vive una crisis humanitaria y política”, dijo Flores para destacar el “enorme alivio” que sin dudas supondría para su país el hecho de que los migrantes en Estados Unidos pudieran regularizar su situación. Miami (EFE)
