Merecido reconocimiento a las mujeres en el Consulado General de El Salvador

Por Roberto PELÁEZ

Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas

                              Proverbios 31:10

 

Continúan las actividades para reconocer a las mujeres, en este mes dedicado a ellas -con el ‘Día Internacional por medio-, y en esta oportunidad las féminas se vistieron de largo en el evento organizado en la sede del Consulado General de El Salvador.

Fue un merecido homenaje a mujeres de origen salvadoreño y a otras de sobresaliente desempeño en el valle, en disímiles tareas, en la que justo es consignar que son un ejemplo.

Junto a Silvia M. Romero, cónsul general de El Salvador, estuvieron otras mujeres, como Martha Patricia Guerra, Lupe Arreola, Carolina Salvador, Dina y María Romero, hasta completar una veintena, todas con un sano orgullo por ser reconocidas, incluida una representante del Departamento de la Policía Metropolitana.

“Para mí constituyó un privilegio compartir con mujeres que trabajan y se hacen sentir con su destacada labor en favor de la comunidad, a ellas, y en especial a la cónsul mi agradecimiento”, subrayó Patricia Guerra, quien extendió una felicitación a todas las féminas “muchas gracias por su aportación”, agregó emocionada.

Y no quiso pasar por alto la oportunidad para significar: “a mi madre, hermanas, amigas, a cada mujer que admiro, y cuyo ejemplo inspira mi vida, muchas felicidades”.

Días antes Patricia tomó parte en el evento organizado por el Club Migrantes de Uruapan (liderado por Eddie Ramos) y Vista al Futuro (con Marychuy Escobedo al frente), donde compartió entre otras con Mimi Quintero, Carolina Ávila, Maritza Rodríguez, María Conchita Espinoza, María Reyes, Gloria Castro y Pily Coblentz, también de distinguido desempeño comunitario.

En la actividad que tuvo por sede el salón anexo a la sede diplomática, con la humildad que la caracteriza, Arreola también exteriorizó su sano orgullo “me alegra mucho este reconocimiento, escuchar las palabras de la cónsul, verme rodeada de tantas mujeres valiosas que de una u otra forma atienden a sus familias y encuentran tiempo para dar lo mejor a la comunidad.

“Me han invitado a diferentes eventos organizados para honrar a la mujer, estoy muy agradecida de que se me tenga en cuenta junto a un grupo tan valioso”, añadió.

Volviendo a las salvadoreñas, aunque no son precisamente el grupo comunitario más numeroso en el valle, una cifra significativa de ellas lleva a cabo o se involucra en numerosas actividades, de carácter político o cultural, deportivo, de solidaridad con familias necesitadas, de tal manera que se hacen sentir, sobresalen. Felicidades a cada una de ellas.

Por muchos años el Consulado General de El Salvador, sus funcionarios, han llevado a cabo múltiples eventos (sin limitarse solo a sus connacionales), que han tenido en el rol protagónico a la comunidad, actividades relacionadas con servicios de salud, entrega de juguetes, entre muchos otras, para patentizar el acercamiento con la gente del valle. Loable ejemplo. Nuestro reconocimiento.

Top