Por Rafael ROMERO
Cuanta diversidad en un grupo de personas de diferentes paises, cuántos matices tiene la cultura, y siempre es oportuno escribir sobre la diversidad, más aun cuando nos separan horas del bien llamado Mes de la Herencia Hispana, del 15 de septiembre al 15 de octubre.
La profesora Marbella Alfonso afirma: cada etnia, con sus respectivas manifestaciones artísticas, resulta un libro abierto que debemos ‘leer’, es importante celebrar, adentrarse en la diversidad, conocer, advierte, compartir, lo que más que separarnos, nos une y hace mas fuerte.
Al adentrarse en la diversidad, se aprende y asimila la cultura de México, El Salvador, Nicaragua, Cuba, Honduras, Ecuador, Costa Rica, Puerto Rico, Guatemala, Panama, Belice, Chile, Colombia, Venezuela, Perú, y que mejor momento que el Mes de la Herencia Hispana, cuando se reconoce lo que los emigrantes hispanos han aportado y aportan a este país, a la economía, la cultura, los deportes, la medicina, la ingeniería, el periodismo...
Sin embargo no se puede perder de vista que la diversidad es también aprender a valorar, asimilar, comprender la cultura del otro, aunque esté muy distante, o su cultura no tenga nada familiar, sea muy distinta, es preciso convivir, más aun en estos tiempos en que la tecnología y las redes lo acercan todo.
La diversidad cultural resulta en extremo variada, algunos países, por ejemplo, tienen un cine muy fuerte, dada su tradición, figuras, resultados nacionales e internacionales; en otros predomina la música o la literatura, la danza, el ballet, la pintura, la comida, el café, los paisajes, o se distingue por la calidad del calzado que fabrica, su artesanía, los pasteles y dulces, quiere decir que diversidad es exactamente eso, lo diverso que distingue, que urge conocer y apreciar, asimilar, y también, porqué no, valorar en su justa medida.