La campaña del presidente Donald Trump y su empeño por revocar los resultados electorales en Nevada se vio frustrada, encajó otro revés, luego que un juez de la Corte de Distrito de Carson City rechazó la solicitud de conceder los seis votos electorales del estado al mandatario.
El juez James Russell frenó con su fallo la solicitud de la campaña del presidente Trump empeñada en bloquear la certificación de los resultados de las elecciones presidenciales en Nevada y de paso otorgar los votos electorales al mandatario. Dicho fallo es una de las derrotas más recientes de la campaña del actual mandatario, que ha experimentado varios fracasos en Nevada.
Abogados de la campaña de Trump manifestaron que disponían de evidencias de fraude en las recién concluidas elecciones, y mencionaron declaraciones anónimas que se referían a irregularidades.
Russell destacó que la evidencia mostrada por la campaña de Trump tenía ‘poco o ningún valor’.
Los demandantes no demostraron evidencias de que hubo votos ilegales o que los votos legales no fueron contados en su totalidad, por cualquier otra razón indebida o ilegal, ni en una cantidad igual o superior a 33 mil 596, o de otra manera en una cantidad suficiente para plantear dudas razonables sobre el resultado de las elecciones, dejó sentado Russell. De paso el juez calificó de incorrectas algunas de las pruebas presentadas.
Russell aseguró que no había evidencia de que las actividades electorales fraudulentas hubieran afectado de alguna manera el resultado de las elecciones presidenciales en Nevada. En correspondencia con este fallo el Tribunal significó que no hay evidencia creíble o confiable de que las elecciones se vieron afectadas por el fraude.
El conteo de los votos en Nevada le dieron diferencia favorable de 33 mil 596 a Joe Biden sobre Trump, y con ello los seis votos electorales. El venidero 14 se emitirán los votos oficiales para los cargos de presidente y vicepresidente. No se descarta que se presente una apelación de inmediato; Russell solicitó a los abogados de ambas partes que tengan listos los borradores de las órdenes con la intención de tener tiempo y presentar una apelación ante la Corte Suprema.