Por Roberto PELÁEZ
Para el inquieto Benjamín Ramírez la participación en el Programa ‘Padres sin Fronteras’, el descuento del 30 por ciento en vuelos a Estados Unidos y México en la compañía Volaris, son sólo algunos beneficios puestos a disposición de los miembros del Consejo de Migrantes Jaliscienses.
“Nuestra organización, dice, se funda a principios de junio del año pasado en Guadalajara, Jalisco, y en la misma están involucradas la Federación de Jaliscienses de Nevada; la de San Francisco; la de San José; el Movimiento de Migrantes de Los Ángeles; la Alianza de Líderes Americanos y Mexicanos (ALMA); los Jaliscienses de Oregon; la Federación del Sur de California; Empresarios de Wisconsin; los Jaliscienses de Chicago, además de otras organizaciones de jaliscienses radicadas en Estados Unidos”, afirma entusiasmado.
Ramírez, quien funge como presidente del mencionado Consejo, destaca: “Para nosotros es indispensable empoderar al migrante jalisciense, que éste forme parte de una comunidad informada, una comunidad fuerte... ése es uno de nuestros objetivos prioritarios, precisó, además, no se puede perder de vista que se trata de una organización binacional.
“Un aspecto que no puede perderse de vista, advierte el entrevistado, es que la directiva del Consejo de Migrantes Jaliscienses la forman personas con reconocida experiencia en el trabajo comunitario, con liderazgo, que han representado por mucho tiempo (entre 15 y 20 años) a los migrantes, y eso no se puede desconocer ni poner a un lado, pues esa misma experiencia contribuye a hacer más sólido el prestigio de la organización; conocemos bien los deberes y derechos de los migrantes, sus inquietudes, los problemas que los afectan”.
Al insistir en los objetivos, enfatiza: “nos anima contribuir al mejoramiento de los municipios jaliscienses, aportar, de manera que nuestra ayuda contribuya a elevar las condiciones de vida; no se debe ignorar que un número considerable de los migrantes jaliscienses procede de los municipios”, resalta.
No hay dudas de que de la gran mayoría de los millones de mexicanos asentados en Estados Unidos, por referirnos sólo a esta nación, un considerable por ciento quiere, desea ayudar al lugar donde nacieron, de donde proceden, y en lo concerniente a Jalisco y sus municipios el Consejo -es incuestionable- puede hacer mucho.
El propio Ramírez reitera: “En Estados Unidos, según datos, residen alrededor de 33 millones de mexicanos, de ellos casi una cuarta parte son jaliscienses, que envían remesas y tratan de incidir en las políticas públicas de sus familiares en México, eso es algo que se debe tener en cuenta, valorarlo”, apunta.
“El Consejo..., externa, se forma para colaborar con el migrante y sus respectivas comunidades, además consideramos que poder disponer de la llamada Secretaría del Migrante es algo de importancia capital, más que todo porque sería de gran utilidad en lo concerniente a promover programas sociales dirigidos a la atención de jaliscienses que viven en Estados Unidos y sus familias.
“Más que todo aspiramos y trabajamos enfocados en el empoderamiento, la inclusión de esa persona que un día partió en busca de una vida mejor, de otros horizontes, y es muy justo que se le tenga en cuenta; pretendemos que el Consejo desempeñe un rol protagónico en las actividades que involucran al migrante, en los proyectos... por eso destacaba antes lo de la experiencia, porque es relevante conocer al migrante, sus necesidades, sólo conociéndolo se le puede representar”, sostiene Ramírez.
