Por Roberto PELÁEZ
A decir de Rafael Pérez, las personas procedentes de San Juan Evangelista Analco, en el estado mexicano de Oaxaca, y que residen en Las Vegas, no son muchas, sin embargo, asegura, contamos con un pequeño grupo que muestra una labor sostenida por años y que descansa en la voluntariedad.
“Quienes viven en nuestro poblado natal, nuestros familiares, amigos, nos conocen, saben que no somos ricos ni brindamos lo que nos sobra, por el contrario, hacemos un esfuerzo y lo que enviamos lo hacemos de corazón, conscientes de las necesidades que existen”, afirma Pérez.
“Llego a los Estados Unidos, recuerda, en 1980, y 14 años más tarde vengo a Las Vegas, la gente de San Juan Evangelista Analco nos damos a la tarea de buscarnos, reunirnos, formar un grupo con el objetivo de ayudar en lo posible, siempre de manera voluntaria...
“El poblado donde nacimos, explica, es un pueblo pequeño... Oaxaca es un estado que quizás esté cerca de los 4 millones de habitantes; Analco cuenta con tres escuelas (pre escolar, primaria y secundaria), los jóvenes con deseos de seguir estudios, viajan a otras localidades; nos alegra saber, resalta, que muchos jóvenes graduados de ingeniería o arquitectura regresan y trabajan en función del desarrollo del lugar.
“Que bien por esos jóvenes, agrega, ellos ponen de su parte y hasta el momento exhiben una labor relevante, sobre todo en el turismo, se empeñaron en la reforestacion -ya con reconocimiento a nivel mundial- para salvar el bosque, y hoy ese bosque, las cabañas construidas cerca del lago, el criadero de peces, y el mismo lago, constituyen nuestro orgullo, mucha gente los visita, el llamado ecoturismo ha tomado mucha fuerza, a tal punto que es hoy el principal renglón de San Juan Evangelista Analco, distrito de Ixtlán de Juárez”, destaca.
“¿Entonces qué hicimos?, se pregunta Pérez, conocemos las dificultades y carencias, decidimos como algo prioritario ayudar a los niños y jóvenes con materiales escolares.
“Enviamos computadoras y útiles escolares, pintura para las escuelas, asegura, creemos que quienes se eduquen, mañana pueden hacer por Analco, vale la pena que hagamos un esfuerzo, cada uno aporte lo que pueda, y lo hacemos llegar, esperamos que muchos decidan seguir adelante con los estudios
“También donde nacimos hay tradición de baloncesto (basket), y apoyamos a los jugadores con balones, uniformes; allí se celebra un torneo anual cada 21 de marzo que reúne hasta 40 equipos... ese es otro de nuestros orgullos”, advierte.
“Para nosotros, externa, es muy difícil que pase un día sin recordar aquel lugar donde nacieron los abuelos, nuestros padres, nosotros mismos, el amor por lo nuestro, los recuerdos, las vivencias, nos lleva a formar un grupo, personas nacidas en San Juan Evangelista nos unimos para platicar y ver la forma de ayudar a su gente... le hablo de 1996, por muchos años nos mantenemos unidos, ayudamos y confiamos en un mejor futuro para aquel lugar y para las personas que quedaron allí”, comenta emocionado.
