Por Roberto PELÁEZ
La más reciente edición del evento denominado ‘Día sin electrónicos’ resultó una verdadera fiesta para los niños, y por qué no, también para los adultos, por lo que se puede asegurar que la actividad, organizada por Familias Unidas en Acción (FUA), alcanzó su mayoría de edad y llegó para quedarse.
Cuando hace unos tres años tuve la posibilidad de platicar con Amanda Salazar, escribí sus palabras en la agenda: Allá por el 2006, afirmó, me percatoo de que era un buen momento para regresar en el tiempo, volver a los juegos de infancia que marcaron a generaciones y que hoy parecen tan distantes, entonces, dijo, organicé par de horas con aquellos aparatos que habíamos dejado en el olvido.
Fue tal el éxito que se fue sumando gente, prosiguió, éste con un juguete, aquel con otro, y cada año más adultos y más niños... que si canicas, hula-hula, juegos de mesa, trompos, entonces el evento alcanzó un tamaño que ni yo imaginaba, destaca Salazar, algunos me pedían organizarlo dos veces al año y hasta cambiar de sede, irnos a un parque, comentó.
Lo pensé muchas veces, dijo, lo consulté con mis compañeras de FUA, porque como se sabe ‘Día sin electrónicos’ no es nuestro único evento, escuchamos diferentes criterios, y por fin en el 2017 nos decidimos y probamos en un parque, trabajamos mucho, es cierto, pero fue un éxito, recogimos el fruto del esfuerzo, quedamos motivadas para este año, agregó.
No puedo menos que agradecer a Laura Ordóñez, Olivia Ureña, Norma Resendiz, Lupita Ramírez, Leticia Ortega, Francisco Contreras, Miroslaba Heredia, Debbie y Sol Jacintos, Felipe Ureña, además de Irma y José Hernández, apuntó Salazar, todos ellos contribuyeron, hicieron su mayor esfuerzo para que ‘Día sin electrónicos’ 2018 fuera un éxito, y a ellos se unieron varias organizaciones... quiero que mi agradecimiento llegue a todos, resaltó.
Para nosotros en FUA está claro que cuanto hagamos por los niños, incluso por las familias, es poco, y unas horas al año, sin electrónicos, ya probamos que se puede, la gente lo acepta, los pequeños se divierten, sostuvo la entrevistada.
No es un secreto, abundó, que la varilla está alta, la hemos puesto alta, y nuestro evento del año que viene exigirá aun más dedicación, horas para prever cada detalle, mejorar aun más el aspecto organizativo, sin embargo debo decirlo, nos sobra voluntad, deseos de hacer las cosas bien, y Familias Unidas gana espacio por días, es también mucho más fuerte, remarcó.
