Por Roberto PELÁEZ
Esposa, madre, abuela, hija amantísima, maestra, POETA, Pily Coblentz es de esas mujeres que no necesita presentación, por ella hablan sus más de tres décadas dedicadas al magisterio, sus libros de poesías, una labor comunitaria que data de años y que los problemas de salud resultan un lastre, sin embargo no desmaya.
“Después de tantos años dedicada a enseñar, asegura, escribir me ha venido a abrir una puerta, tener la posibilidad de unir en un libro los poemas de mi mamá y míos, fue como una bendición, encontrar a personas que me animaran, poder contar con un ejemplar físico del poemario, verme en los encuentros de escritores, son acciones como el clásico ‘tanque de oxígeno’, eso no puedo olvidarlo”, advierte.
Tiene un fuerte vínculo con Guatemala, Costa Rica, México, Estados Unidos, en cada uno de esos países ha dejado una huella, sentado pautas que las actuales y nuevas generaciones no pueden obviar, más que todo porque ha contribuido a formar niños, adolescentes y jóvenes.
“Formar alumnos, transmitirles mis conocimientos, recibir sus llamadas para agradecerme, una tarjeta de felicitación, saber que muchos han proseguido sus estudios, se han graduado en diferentes ramas, son útiles a la sociedad, también me reporta gran satisfacción en lo personal y lo profesional”, comenta emocionada.
“He comenzado el año inspirada -dice y me extiende su poema más reciente-, Dios me de fuerzas y salud para ver publicado mi tercer libro, volver a estar entre los escritores”.
Pasó el año y vivo/llegó el nuevo y estoy viva/a pesar de predicciones... vivo.
Mi ilusión se ha transformado/en deseos tan deseados/con espera de lograrlos/y bendición para contarlos.
Se abren puertas nuevas/desconocidas y tan bellas/esperando en sus espacios/formular sueños deseados.
Otras nuevas intenciones/nuevos proyectos literarios/muchos educativos/recreativos/otros familiares y de alegrías compartidas serán/y otros de amores y de pareja/que llenan tanto el corazón.
Pily no se detiene, quiere aprovechar el tiempo al máximo, escribe, va por buen camino y lo que es mejor, piensa en los demás.
