Por Roberto PELÁEZ
Ayudar sigue siendo nuestra prioridad, tanto a los guerrerenses de nuestra organización como a quienes residen en el lugar donde nacimos y de ellos damos muestra varias veces al año.
La afirmación corresponde a Othon Molina, fundador y líder del grupo Comité Cruz Grande Guerrero, asentado al oeste de la ciudad de Las Vegas; tras el envío de mil 900 dólares para remozar la iglesia de aquella localidad, la mima iglesia que conocemos todos los de Cruz Grande, a la que asisten nuestros familiares y amigos; para nosotros en el Comité es un reto, y lo enfrentamos con esfuerzo, con muchos deseos de ayudar a que las cosas vayan mejor para nosotros y para la gente de la localidad donde nacimos, donde nacieron los abuelos, los padres, de ahí el sacrificio; fuimos invitados a cooperar y estamos jugando nuestro papel, sostiene.
Ya nos informaron que remozar la iglesia tendrá un costo de cerca de tres millones de pesos mexicanos, enviamos un donativo de mil 900 dólares, cerca de 35 mil pesos... la remodelación será en cuatro etapas: la iglesia como tal, el atrio, la casa parroquial y adjunto un parque con juegos para los niños.
El grupo, lo hemos dicho antes, se funda en un momento difícil, muy difícil, inundaciones en México, específicamente en Guerrero y Chiapas, y aquí muchas personas perdiendo sus trabajos... hablo del 2013, sostiene Molina.
La organización “nace” en medio de muchas necesidades, asevera el entrevistado, aún así conseguimos hacer llegar a Cruz Grande nuestras donaciones, y también ayudar a miembros del grupo que perdieron sus trabajo o se enfermaron y no tenían para pagar sus biles, o sea, nos damos a conocer y registramos de manera oficial en el Consulado de México en medio de carencias, resalta.
A una pregunta sobre cómo hacen llegar su ayuda, salen a relucir los nombres de Nancy Castillo y Rafael Ramírez, son amigos, precisa Molina, tienen en Cruz Grande su equipo de trabajo, con mucho prestigio por cierto, en ellos nos apoyamos, actúan de manera muy transparente.
Todo se ha encarecido, comenta Molina, no hay presión para que brindemos nuestra cooperación, y los miembros del Comité contribuyen en la medida de sus posibilidades, ya entregamos nuestro primer donativo, quizás en las siguientes etapas podamos volver a tender la mano, es algo, y reitero, ayudar es la razón de ser del Comité Cruz Grande en Las Vegas, sin hacer política, lo nuestro es que la gente vea mejorías en su nivel de vida, hoy la iglesia, mañana una cancha, un techo, juguetes, sillas de ruedas, eso sin desatender los problemas de los integrantes del Comité.
Es muy importante que la gente en Cruz Grande sepa que aunque lejos estamos cerca, que trabajamos por salir adelante con nuestras familias, que con nuestra labor también ponemos en alto el nombre del lugar donde nacimos, y ayudamos... de eso se trata, expresa.
