Por Roberto PELÁEZ
En medio de un ambiente de contagioso entusiasmo y confianza en el futuro, de renovación e innovación de la ciudad, el jueves 11 la alcaldesa Carloyn Goodman leyó su informe annual denominado ‘State of the City’, ante un teatro abarrotado de personas que la interrumpieron varias veces para aplaudir.
La lectura del esperado informe estuvo precedida de un vídeo para recordar a las 58 personas que fueron asesinadas el primero de octubre del año pasado, cuando un hombre disparó desde una habitación del hotel y casino Mandalay Bay, durante el Festival de la Cosecha Route 91 en el Strip de Las Vegas. Aquel triste día, afirmó la alcaldesa, cambió la ciudad de Las Vegas y la acción puso en riesgo el presente y futuro de Las Vegas como destino turístico global.
No somos invulnerables en lo que respecta a la seguridad ante hechos que ponen a prueba nuestra capacidad, para ser vulnerables es necesario financiación, apoyo, atención, significó; duele reconocer que no somos inmunes a problemas de seguridad recurrentes, enfatizó.
Entre algunas que otras bromas, la alcaldesa Goodman se refirió entusiasmada a las iniciativas de mejoras que se contemplan relacionadas con el importante renglón de la salud, y del desarrollo que experimenta el centro de Las Vegas.
No podemos desconocer que la aspiración de contar con más viviendas en el centro tuvo una pausa provocada por la recesión, pero hoy podemos apuntar que la Ciudad planea disponer o agregar 5 mil 500 unidades de viviendas en los próximos años.
El plan maestro de la ciudad, explicó, “será sin dudas clave y debe dejar preparado el escenario para el futuro desarrollo del distrito médico de Las Vegas, Symphony Park, Cashman (Field) y todos los nuevos desarrollos que lleguen al corazón de la ciudad”... los aplausos no se hicieron esperar en prueba de aceptación por parte de los presentes, entre los que se encontraban Stavros S. Anthony, Bob Coffin, Louis Tarkanian y Ricky Barlow, pertenecientes al Concilio de Las Vegas.
Por otro lado la oradora no dejó pasar la oportunudad para enviar un mensaje a la industria hotelera: “No cobre por ir al baño, ni por todo lo que estás haciendo”, y de inmediato puso sobre la mesa un mensaje alentador: queremos reducir el número de personas sin hogar, un aspecto en que tenemos mucho que mejorar, ofrecerles servicios médicos y empleo a los desposeidos, sostuvo.
El mundo, aseguró, tiene sus ojos puestos en Las Vegas por nuestro ritmo de innovación y renovación que convierten a esta ciudad en algo más que un destino para los juegos de azar, hay que mostrar todo lo que podemos hacer gracias al trabajo, el empeño y la dedicación, al apoyo; queda mucho por hacer, reiteró, pero aquí estamos, con más entusiasmo que el primer día para trabajar por una ciudad cada vez más hermosa, funcional.
