El Instituto Nacional de Migración (INM) aceptó las medidas cautelares emitidas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) respecto al incidente que se suscitó en la estación migratoria de Tenosique, Tabasco, donde perdió la vida un migrante guatemalteco.
Los hechos tuvieron lugar cuando un grupo de migrantes originarios de Honduras, albergados en esa estación migratoria, prendieron fuego a colchonetas como una forma de presionar a las autoridades migratorias para lograr su retorno a su país ante la emergencia sanitaria provocada por la pandemia del COVID-19.
Por esa acción 15 migrantes resultaron intoxicados y un hombre de 42 años de edad murió por asfixia por la inhalación de humo, reportó el INM.
El Instituto informó que mantiene constante comunicación con la representación diplomática de Guatemala en el país, a fin de ofrecer orientación médica y psicológica a los familiares del hombre, a quienes también se les ha ofrecido ayuda para que regularicen su situación migratoria en México.
De igual forma informó que el albergue, con capacidad para 170 personas, se encuentra desalojado y los migrantes fueron reubicados en otros centros donde se les brinda alojamiento en condiciones dignas.
“El INM coincide con la CNDH, así como con la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), en garantizar en todo momento la protección de los derechos humanos de las personas en contexto de movilidad”, afirmó en un comunicado.
En ese sentido, Migración lanzó un exhorto a esos organismos para que entablen un diálogo con los gobiernos de Honduras, Guatemala y El Salvador a fin de que, a través de una política humanitaria, abran sus fronteras a sus connacionales que deseen regresar a su país. México (NOTIMEX)