Cuatro agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) fueron detenidos el pasado martes 27 de agosto en la Ciudad de Guatemala, señalados cada uno de ellos por exigir dinero a migrantes de diversas nacionalidades con el fin de dejarlos pasar rumbo a la frontera con México, empeñados en proseguir camino rumbo a los Estados Unidos, donde desean comenzar una nueva vida y salir adelante.
El ministro de Gobernación (Interior), Francisco Jiménez, dijo en su cuenta oficial de la red social X que se trata de cuatro agentes “corruptos” que fueron capturados y agregó al referirse a la censurable acción “por eso pagarán caro sus actos”.
Jiménez recordó que hace alrededor de un mes la cartera a su cargo consideró oportuno dejar inaugurado el Centro Anticorrupción Policial, con el que espera controlar las faltas que cometan los integrantes de las fuerzas de seguridad.
Se pudo conocer que los agentes detenidos en esta oportunidad forman parte de la comisaría que cubre la zona sur de la capital y fueron sorprendidos en la Central de Mayoreo (conocido por las siglas CENMA), que es el lugar donde arriban decenas de buses utilizados por migrantes para transportarse hacia la frontera suroeste entre Guatemala y México.
Los policías en cuestión son acusados de exigir al menos 100 dólares a cada migrante que deseara viajar en un autobús con rumbo a la ciudad fronteriza de Ayutla, por donde tienen la posibilidad de cruzar el paso fronterizo de Tecún Umán para ingresar a México por el estado sureño de Chiapas, siempre -lo han manifestado- con el objetivo de continuar su viaje hacia los Estados Unidos, que es la aspiración de la mayoría de los emigrantes.
La identidad de los cuatro agentes de seguridad pública no fue revelada por las autoridades que llegaron al lugar de la captura luego de escuchar las denuncias.
Durante lo que ha transcurrido del 2024, las autoridades guatemaltecas han rechazado el ingreso a su país de más de 8 mil 900 migrantes de diversas nacionalidades, principalmente de Venezuela, que dada la situación imperante en aquel país muestra un éxodo significativo, alarmante. Guatemala (EFE)