Cuarenta días después de que 56 extranjeros fallecieran en un trágico accidente de tránsito en el suroriental estado mexicano de Chiapas, se celebró una misa en conmemoración de las víctimas en el estado mexicano de Chiapas (sureste).
La misa se llevó a cabo en una calle contigua a la carretera en la que se registró el accidente, el pasado 9 de diciembre, a la que asistieron vecinos de las localidades de Chiapa de Corzo y Tuxtla Gutiérrez.
El párroco de la iglesia de la Señora del Refugio, Jorge Luis Sánchez, ofició la misa ante más de un centenar personas que se congregaron en un espacio al aire libre junto a la carretera.
El religioso recordó que la mayoría de estos migrantes “iban en camino a buscar una vida mejor”, con base en su trabajo, y con el objetivo de mejorar las condiciones de sus familias en sus países de origen, pero la tragedia los alcanzó en este punto.
Por ello, llamó a los Gobiernos centroamericanos y de los países que tienen el poder “a ser más solidarios con estas naciones o lugares donde hay más pobreza” y dijo que es necesario crear más recursos económicos y fuentes de trabajo.
Señaló que “definitivamente debe de haber un mejor apoyo tanto en lo económico como en leyes que ayuden a los que tienen que salir de sus países en busca de un trabajo y una vida mejor”.
El sitio en el que murieron los migrantes se ha convertido en un espacio de oración donde se construyó un nicho en honor a la Virgen de Guadalupe y se programó que cada día 9 del mes se realicen misas, rosarios o al menos una oración para que la tragedia no solo sea un recordatorio de muerte sino en honor a estas personas.
Según la Fiscalía General de la República, hasta ahora se han entregado a sus familiares los cuerpos de 54 de los 56 migrantes que perdieron la vida y únicamente uno no ha sido identificado.
El trágico accidente se registró el pasado 9 de diciembre en la carretera de Tuxtla Gutiérrez a Chiapa de Corzo, en el estado mexicano de Chiapas.
En el tráiler viajaban escondidos más de 160 migrantes; la mayoría provenían de Guatemala, República Dominicana y El Salvador.
Viajar hacinados dentro de camiones es una de las formas más peligrosas formas de cruzar clandestinamente México que utilizan los migrantes tras pagar miles de dólares a sus coyotes o traficantes.
Apenas el pasado domingo, el Instituto Nacional de Migración (INM) informó que un total de 359 migrantes centroamericanos que viajaban hacinados en un camión fueron detenidos en el estado mexicano de Veracruz.
La región vive un flujo migratorio récord hacia Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza detectó a más de 1,7 millones de indocumentados en la frontera con México en el año fiscal 2021, que terminó el 30 de septiembre.
Mientras que México ha interceptado a más de 252 MIL migrantes indocumentados de enero a noviembre y deportó a más de 100 mil en el mismo periodo, de acuerdo con la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación del país.
La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados recibió un récord de 131 mil 488 solicitudes de refugio en 2021. Tuxtla Gutiérrez (EFE)