El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, renovó su llamado contra el odio y la intolerancia hacia inmigrantes y urgió a la ciudadanía a tener presente que sus raíces son similares a la de éstos para evitar repetir errores del pasado.
"A menos de que tu familia sea nativa americana, nuestras familias (...) vienen de otro lado", dijo el mandatario este martes en el Museo de los Archivos Nacionales, poco después de la ceremonia en la que 31 inmigrantes hicieron su juramento como nuevos ciudadanos estadunidenses.
En su mensaje, el segundo que dirigió a los estadunidenses en poco más de una semana tras el ataque terrorista de San Bernardino, Obama buscó apagar el clima de hostilidad contra los musulmanes y refugiados sirios de cara a esos hechos y los ataques en París, Francia, del pasado 13 de noviembre.
"Debemos comprometernos a ser firmes contra el odio e intolerancia en todas sus formas", dijo el mandatario ante los 31 nuevos ciudadanos provenientes de 25 países, invitados y funcionarios de su gabinete, reunidos en la sala donde se exhibe el documento original de la constitución estadunidense.
Obama recordó episodios en el que el odio y la intolerancia contra inmigrantes llevaron a la comisión de actos de injusticia, como el envío a campos de concentración de japoneses, muchos de ellos ciudadanos estadunidenses, durante la Segunda Guerra Mundial.
"Nosotros hemos traicionado estos documentos antes", dijo el mandatario en alusión a la Constitución, por lo que pidió a los nuevos ciudadanos que "en días como éste, debemos estar determinados a nunca repetir errores como ese".
En su mensaje, Obama recordó la tradición de larga data de este país de recibir inmigrantes y de las enormes contribuciones que éstos y los refugiados han hecho al bienestar y la seguridad de Estados Unidos.
Empero, dijo que con frecuencia, aquellos que llegaron a Estados Unidos como inmigrantes o cuyas raíces son de otros países, con frecuencia se olvidan de ello, razón por la que pidió a los nuevos ciudadanos tener su origen siempre presente.
Subrayó que el clima de intolerancia en algunos segmentos de la población ha colocado a los inmigrantes mexicanos en el mismo lugar en que estuvieron los católicos de un siglo atrás, "y en los sirios que buscan hoy refugio, deberíamos ver los refugiados judíos de la Segunda Guerra Mundial".
El vocero presidencial Josh Earnet caracterizó el discurso del mandatario como un llamado para evidenciar la divisoria retórica presente en la campaña presidencial republicana "y que seguramente será evidente en el debate (presidencial) de esta noche". Washington (NOTIMEX)