Al menos 4 mil 200 migrantes en la frontera sur de México alistan una nueva caravana para el próximo 24 de diciembre, en medio de las festividades de Navidad y Nochebuena.
Los migrantes y organizaciones, como el Centro de Dignificación Humana (CDH), advirtieron que esto se da ante la nula respuesta de las autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) a sus trámites migratorios.
En menos de 48 horas se han enlistado en un censo al menos 4 mil 200 migrantes cubanos, africanos, haitianos, venezolanos, chinos y centroamericanos, al no conseguir papeles para llegar a la frontera mexicana con Estados Unidos de forma legal.
Luis Rey García Villagrán, coordinador general del CDH y quien acompaña a los migrantes, confirmó que en caso de no ser atendido en los próximos 10 días, saldrían en un nuevo éxodo de migrantes el próximo 24 de diciembre.
Dijo que en su lista, abierta hasta el próximo viernes 15, se han anotado un 45 % de cubanos, 25 % procedentes de Honduras, siendo las principales entre otras nacionalidades.
“Lo único que ha hecho el Estado mexicano es establecer que caminen (los migrantes) y las personas ya no quieren avanzar a pie, por lo que pretendemos que se nos entreguen documentos por un juez federal y si no lo deciden así los magistrados nos van a obligar a realizar otras cosas dentro del marco legal”, señaló.
Los extranjeros que han iniciado estas listas son personas que han solicitado trámites de la petición de asilo, visas por razones humanitarias, pero a la fecha no han encontrado una respuesta.
Mario Jonas Sosa es un migrante venezolano discapacitado que dejó su país por la dictadura y la crisis económica que enfrenta su lugar de origen.
Decidió salir con su esposa, dos hijos y algunos sobrinos para emprender la peligrosa ruta migratoria por la que han atravesado ocho países para llegar a la frontera sur de México.
Sosa contó a EFE que a los 12 años tuvo un accidente, le colocaron una prótesis y ocho clavos en su otra pierna, por lo que usa muletas para apoyarse.
Su discapacidad no lo detuvo, puso un negocio, pero debido a la crisis quebró y abandonó su país.
“En Venezuela tenía mi negocio, pero con la situación del país, con el presidente que tenemos, (...) nos hace salir. No hay medicinas, no hay empleo, no hay nada, es difícil vivir en Venezuela, tomamos la decisión de agarrar la Selva del Darién para escapar de la dictadura”, dijo.
Este migrante ahora se encuentra en un albergue en Puerto Madero y decidió llegar a Tapachula por la convocatoria que ha hecho el Centro de Dignificación Humana (CDH) para solicitar papeles al Gobierno de México y también se sumarán al contingente que saldrá en Navidad si no reciben respuesta de las autoridades locales.
Otro migrante, originario de Honduras y quien se ha unido a esta multitud de migrantes en el Parque Bicentenario, en Tapachula, estado de Chiapas, indicó que poder obtener un documento es el mejor regalo que les puedan dar en esta época navideña.
“Con este permiso que nos den podíamos avanzar de un solo viaje evitando los retenes de migración (...) algunos tienen ciertas facilidades, pero la mayoría incluso estamos en calidad de calle”, expresó.
Este joven migrante, quien pidió el anonimato, apuntó que, en Honduras, era licenciado en comunicación y publicidad, pero abandonó su actividad por la inseguridad. Tapachula (EFE)