El representante demócrata Jesús García, de Illinois, pidió al gobierno del presidente Joe Biden que informe sobre tres niños mexicanos de 5, 6 y 9 años de edad que se encuentran en un centro de detención para migrantes indocumentados.
“Nos enteramos del caso de los hermanos Vargas que llegaron a la frontera entre Estados Unidos y México el 29 de junio de 2021, y de los esfuerzos de su abuela por reunirse con ellos”, dijo a Efe Fabiola Rodríguez, portavoz del legislador.
La madre de los menores está presa en México, el padre fue asesinado en Cancún, y la abuela busca la custodia de las dos niñas y el niño que se presentaron a las autoridades fronterizas de Estados Unidos en Laredo, Texas.
“Nuestra oficina se comunicó de inmediato con el Departamento de Salud y Servicios Humanos, que es la agencia que supervisa la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR), así como con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP)”, indicó Rodríguez.
“Solicitamos una actualización del paradero de los niños y una fecha estimada de cuándo serán entregados a su familia. El congresista García seguirá haciendo todo lo que esté a su alcance para reunificar a esta familia lo antes posible”, agregó.
Julie Contreras, integrante de United Giving Hope, un grupo que aboga por los migrantes, dijo en una entrevista televisada que los niños se comunicaron brevemente con su abuela por teléfono el 29 de junio y desde entonces no ha habido otro contacto familiar.
El Gobierno de Biden, que mantiene la política de su predecesor Donald Trump bajo la cual los indocumentados son rechazados en la frontera, ha permitido sin embargo el ingreso al país de los menores de edad que llegan sin familiares adultos.
Los niños, por ley, no pueden permanecer bajo custodia de la Patrulla Fronteriza por más de 72 horas y deben ser transferidos a la ORR, una dependencia del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), a la espera de que sean localizados familiares o adultos responsables dentro de Estados Unidos.
El HHS tiene actualmente bajo su custodia a más de 14.200 migrantes menores de edad.
Los hermanos Vargas, dijo Contreras, han sufrido mucho y “el niño de cinco años no puede hablar, usa pañales, necesita atención especial y estos niños necesitan estar en el brazo de su abuelita”. Washington (EFE)
