La Red Fronteriza por los Derechos Humanos (BNHR, por su sigla en inglés) lanzó su campaña de documentación de abusos de inmigrantes en Estados Unidos y México, que coincide con la investigación que se lleva a efecto relacionada con el asesinato de un migrante en la frontera de Texas.
La campaña, un esfuerzo que BNHR ha desarrollado por más de dos décadas, este 2022 se extenderá a varias ciudades de México en los estados de Oaxaca, Chiapas, y las ciudades de Veracruz, Puebla y Ciudad de México, entre otras zonas que son paso obligado para los inmigrantes cuya aspiración -por lo general- es llegar a Estados Unidos.
Del lado estadounidense, la campaña incluirá informes de abuso reportados en las comunidades de El Paso, Sur de Nuevo México y los Centros de Derechos Humanos en las áreas de Presidio, Del Río, así como en el Valle del Río Grande, en el estado de Texas.
Fernando García, director ejecutivo de BNHR, explicó en una conferencia de prensa que el esfuerzo que se lleva a cabo pretende no solo identificar los abusos de los que son víctimas los inmigrantes sino también las personas que residen en comunidades fronterizas.
“Hemos escuchado denuncias sobre perfil racial de la que son víctimas personas que viven en estas ciudades fronterizas”, advirtió García.
La medida entrenará a decenas de miembros de las comunidades que entrevistan a los migrantes para registrar denuncias sobre violaciones de derechos humanos.
La campaña, que se extiende hasta el venidero diciembre, arranca precisamente cuando las autoridades de El Paso (Texas) investigan la muerte de un migrante, lamentable hecho ocurrido en el llamado sector de Sierra Blanca, a causa de un tiroteo que dejó también como saldo a una inmigrante herida.
Michael y Mark Sheppard, ambos de 60 años, fueron arrestados horas después en relación con el hecho.
Las investigaciones llevaron a la detención de los hermanos Sheppard, quienes supuestamente detuvieron su camión cerca de Sierra Blanca y abrieron fuego contra un grupo de migrantes que buscaban agua en la carretera.
Al referirse al lamentable incidente, García precisó que los sospechosos “literalmente cazaron” a los inmigrantes.
Por otro lado también cuestionó las razones del ataque, y se preguntó si existe una relación entre este hecho y las políticas antiinmigrantes de funcionarios republicanos en el estado de Texas, y otros lugares del país, que se han fomentado.
Centenares de migrantes han sido enviados en autobus desde Texas a Nueva York. México (EFE)
