Un juez federal ha ordenado al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que haga pruebas de la covid-19 a los inmigrantes detenidos antes de su transporte al Centro de Detención del Noroeste (NWDC) en Tacoma, estado de Washington, en medio de un repunte en los casos positivos en esta cárcel.
El magistrado James L. Robart, del Tribunal federal en el Distrito Oeste de Washington, dio la orden el lunes por la tarde tras considerar una demanda de inmigrantes detenidos con condiciones médicas preexistentes y que corren mayor riesgo si contraen el virus.
Robart también ordenó a ICE que use la información de las pruebas para garantizar que las personas detenidas que den negativo no estén expuestas a las que den positivo, limitando la transmisión del virus.
En su fallo, el juez concluyó que ICE ha violado los derechos constitucionales de las personas detenidas médicamente vulnerables en NWDC, donde un brote de la covid-19 se ha extendido rápidamente en los últimos meses.
Actualmente en este centro de detención de Tacoma hay 38 detenidos aislados o vigilancia médica con casos positivos de la covid-19, según datos del ICE.
Sin embargo, los abogados de los demandantes aseguran que desde principios de junio más de 240 personas dieron positivo en el centro de detención, incluidos casi dos docenas de miembros del personal, indicaron en un comunicado.
Los inmigrantes detenidos están siendo representados por el Proyecto de Derechos de los Inmigrantes del Noroeste (NWIRP), la Unión Americana para las Libertades Civiles (ACLU) en Washington, el Proyecto Nacional de Prisiones y el Proyecto de Derechos de los Inmigrantes.
Las organizaciones aseguran que el brote se produjo después de que ICE comenzó a transferir a los detenidos desde la frontera sur a NWDC sin someterlos a pruebas de coronavirus primero, lo que generó una "situación peligrosa".
“Los inmigrantes han estado expuestos a la covid-19 durante estos largos vuelos..., y una vez que llegan al centro de detención, a menudo se los coloca en celdas con otros detenidos mientras esperan días para obtener los resultados de las pruebas”, resaltan en el comunicado las organizaciones.
“En este punto de la pandemia, las pruebas son una herramienta generalizada que todos conocemos y entendemos como clave para mitigar la propagación del COVID-19”, ahondó Aaron Korthuis, abogado de NWIRP.
En este sentido, Eunice Cho, abogado senior del Proyecto Nacional de Prisiones de la ACLU, valoró que “la indiferencia de ICE por la salud y la seguridad de las personas detenidas es inconcebible”.
"Esto solo subraya la inhumanidad inherente de nuestro sistema de detención de inmigrantes”, añadió Cho.
Según los datos de ICE a este martes, 1.248 migrantes detenidos están lidiando con el virus tras dar positivo. En lo que va de la pandemia 25.512 migrantes detenidos por esta entidad han sido contagiados con la covid-19. Los Ángeles (EFE)