Organizaciones defensoras de los inmigrantes fustigaron al presidente Donald Trump, por cancelar el Programa de Estatus de Protección Temporal (TPS) para 59 mil inmigrantes haitianos.
El Departamento de Seguridad Interna (DHS) puso fin al programa puesto en marcha en 2010, tras el terremoto que dejó más de 200 mil muertos; los haitianos deben salir de EEUU en julio de 2019.
“Es una decisión cruel, carente de humanidad por parte de una administración que promueve una agenda racista y xenofóbica”, señaló el director ejecutivo de Casa Maryland, Gustavo Torres.
Kika Matos, del Movimiento por una Reforma Migratoria Justa (FAIR) señaló que le corresponde al Congreso aprobar una legislación que incluya una solución permanente que proteja a los haitianos, y a otros beneficiarios del TPS.
Antes el DHS había cancelado el TPS para dos mil 500 nicas que saldrán del país en enero de 2019 y extendido sólo por seis meses la estadía de 86 mil hondureños aunque en este caso aún deben hacer una determinación final.
“La administración Trump muestra que carece de decencia humana al anunciar el fin del TPS para los haitianos en la temporada de fiestas de fin de año”, dijo Angélica Salas, directora de CHIRLA.
Steve Choi, de la Coalición Migratoria de Nueva York, hizo un llamado al Congreso para aprobar una legislación de protección que permita la permanencia de los inmigrantes, así como un alivio permanente.
La decisión sobre los haitianos es una nueva acción de la administración Trump contra beneficiarios del TPS que llegaron lo mismo de África que de países centroamericanos afectados por la guerra civil y los desastres naturales.
La mayoría de los inmigrantes haitianos beneficiarios del TPS se asentaron en la zona de Miami y se mantienen activos en busca de una solución permanente.
Durante el mandato de Barack Obama extendieron los programas regularmente, Trump asume una postura más restrictiva en materia migratoria.
Legisladores demócratas presentan iniciativas para darles un alivio migratorio permanente, pero no han avanzado ni en la Cámara de Representantes ni en el Senado. Washington (NOTIMEX)
