El flujo de migrantes a Estados Unidos aumentó de 2010 a 2013, a pesar de que en el caso de los mexicanos, que constituyen la mayor proporción, se redujo uno por ciento, según un estudio del conservador Centro para Estudios de Migración (CIS).
El documento, elaborado a partir de datos de la Oficina del Censo, mostró que la migración proveniente de México se redujo uno por ciento durante este periodo, aunque no detalló las causas de esta disminución.
El reporte mostró que la población inmigrante, tanto legal como indocumentada, se incrementó en 1.4 millones de personas durante esos tres años, para ubicarse en 41.3 millones.
Desde 2000, la población inmigrante ha crecido en unos 10.2 millones de personas, de acuerdo con el documento.
El estudio calcula un aumento de 400 por ciento respecto a los 9.6 millones de inmigrantes que residían en Estados Unidos en 1970.
Un aspecto notable en el reporte es que el grueso de los recientes flujos migratorios provino de regiones distintas a Latinoamérica, que en décadas anteriores fue una de las principales fuentes migratorias.
Entre 2010 y 2013, el mayor crecimiento de esta migración, 16 por ciento, provino del sur de Asia, seguido por 13 por ciento de Oriente Medio y el Sahara, seis por ciento del Caribe y cinco por ciento de los países del oriente asiático.
Por países, los mayores flujos provinieron de Arabia Saudita, con un aumento de 97 por ciento; Bangladesh (32 por ciento), Irak (26 por ciento), India (14 por ciento), República Dominicana (13 por ciento) y China (10 por ciento).
El reporte agregó que en ese mismo período, cuatro millones de inmigrantes optaron por asentarse de manera definitiva en Estados Unidos.
La actual población de inmigrantes legales e indocumentados representa 16 por ciento de los habitantes de Estados Unidos, entre los cuales los mexicanos componen la mayoría con 11.6 millones de personas. Washington (NOTIMEX)