La mexicana Alejandra Juárez, esposa de un veterano condecorado del Cuerpo de Marines de Estados Unidos, pudo celebrar este Día de la Madre en Florida con sus dos hijas estadounidenses después de haber sido deportada en 2018 durante el Gobierno de Donald Trump gracias a la aprobación de un permiso humanitario de la actual Administración.
A su llegada a Orlando, en el centro de Florida, Juárez, de 42 años, agradeció al Gobierno del demócrata Joe Biden, a políticos y a sus abogados por permitirle reunirse con su esposo, Cuauhtémoc Juárez, de 44, y sus hijas de 11 y 19 años, en territorio estadounidense.
El congresista de origen puertorriqueño Darren Soto señaló que se trató de una deportación "injusta" y se mostró feliz de que la mujer podrá estar con sus hijas Estela y Pamela gracias al permiso humanitario que, sin embargo, es temporal.
"Nuestra pelea no termina hasta que Alejandra logre un estatus migratorio permanente y todas las familias separadas sean reunidas", expresó el demócrata Soto en un comunicado.
"Quiero agradecer a Darren Soto (...). Así es como luce la sanación. Esto es lo que está haciendo este presidente, sanando a este país. Gracias presidente Biden, gracias, que Dios lo bendiga", dijo Juárez a la prensa en el aeropuerto.
Soto agregó que el Congreso tiene que aprobar medidas migratorias que ayuden a la reunificación familiar, entre ellas una que protege a los cónyuges de veteranos.
La travesía de la mexicana, que residía en la ciudad de Davenport, en el condado Polk (Florida), comenzó en 2013 en una parada de tráfico cuando la policía local la detuvo y la entregó a las autoridades federales de inmigración por ser indocumentada.
Juárez entró al país de manera ilegal en 1998 y fue deportada veinte años después, en agosto de 2018, como parte de las fuertes políticas migratorias del expresidente Trump (2017-2021).
La política migratoria de "tolerancia cero" del republicano separó además a por lo menos 5 mil 500 niños inmigrantes de sus padres, según la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU).
Esta organización detalla que hasta la fecha, aproximadamente 400 padres separados de sus hijos en la frontera no han sido localizados y se estima que unas mil familias aún no se han reunificado. Miami (EFE)
