El negociador jefe del Sindicato de Actores de EE.UU. (SAG-AFTRA), Duncan Crabtree-Ireland, pidió a los líderes de los estudios de Hollywood su intervención para la realización de un nuevo convenio colectivo.
“Creo que los directores ejecutivos (de los estudios) tienen que participar para que los acuerdos lleguen a buen puerto y se produzca el cambio necesario para que estos contratos sean justos para nuestros miembros”, afirmó el negociador al medio especializado Variety.
Los intérpretes se encuentran en huelga desde el 14 de julio y no han vuelto a la mesa de negociaciones de forma oficial con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP) para la creación de un nuevo convenio colectivo.
Crabtree-Ireland reconoció que el gremio sostuvo “conversaciones indirectas” con la AMPTP gracias a expertos en la industria que han fungido como mediadores.
El negociador también aseguró que seguían dispuestos a volver a la mesa de negociaciones con la AMPTP y dejó claro que incluso estaban dispuestos a ceder en algunas de sus propuestas para llegar a un acuerdo.
“El principio de compartir los ingresos del ‘streaming’ es lo más importante, y estamos abiertos a negociar los mecanismos exactos de cómo hacerlo. Espero que se haya transmitido ese mensaje y que tenga eco en ellos”, mencionó Crabtree-Ireland.
La alianza de productores, que representa a plataformas como Netflix, Disney y Amazon, retomó el diálogo con el Sindicato de Guionistas de EE.UU. (WGA), en huelga desde el pasado 2 de mayo por causas similares a las de los actores. Pasan semanas y lamentablemente las partes siguen sin llegar a avances, a algo sustancial, de ahí que no hayan llegado a acuerdo alguno. Las pérdidas serán cuantiosas, tema de que se ha platicado bastante.
Crabtree-Ireland aseguró que el SAG-AFTRA y el WGA están unidos, mantienen las mismas posturas sobre temas como pagos de los derechos residuales del “streaming” y regulación de la inteligencia artificial.
El pasado 17 de este mes, el gremio de guionistas publicó un estudio en el que pedía asistencia gubernamental para regular el “streaming” ante las “prácticas anticompetitivas” de Disney, Amazon y Netflix, en el que mantenía que la forma en la que operaban dichas empresas perjudicaba la creatividad. Los Ángeles (EFE)