Por Roberto PELÁEZ
Cuántas veces crees que el público se ha puesto de pie para aplaudir al maestro del arpa Mariano González... ni yo mismo sé contar las veces que lo han ovacionado, afirma el percusionista Pedro ‘Chiqui’ García. Así mismo el legendario cantante estadounidense Tony Orlando, precisa: en sus presentaciones Mariano logra conquistar a la audición y recibe cerradas ovaciones.
Mariano es un gran arpista, un excelente músico y mejor ser humano, precisa Flavio Martínez, un flautista de marca mayor.
Desde hace varios años González reside en Las Vegas, es un paraguayo que viene de una familia marcada por fuerte vocación musical. Es un enamorado de la música y un apasionado del arpa. ¿No lo ha visto tocar? Pues apúrese a verlo.
Por el momento, tras pasear su extraordinario virtuosismo por medio mundo, países de Asia, Europa, casi toda Latinoamérica, Estados Unidos, interpretando números antológicos, el artista hace las maletas y ensaya horas con la vista puesta en el quinto encuentro internacional de arpistas, a efectuarse en Colombia el 6 de septiembre.
Lo recuerdo cuando estaba en “Los mensajeros del Paraguay”, le dieron no sé cuantas veces la vuelta al mundo, precisa el investigador Augusto Lemus... estuvo unos 20 años en Japón, estudiando, está muy capacitado, abunda.
Al hablar de los mejores arpistas del mundo, salen a relucir los nombres de Julio Poalasín, Mika Agematsu, Digno García, Gonzalo Castro y Daniel Jordán, dice Lemus, pero es difícil, uno sobresale por la velocidad de sus dedos al ejecutar, otro por la versatilidad, la técnica, son referentes mundiales, y ahí, para orgullo de Paraguay y de Las Vegas, se debe incluir a Mariano, se lo ha ganado, no creo que el arpa tenga secretos para él.
Al platicar sobre el evento en Colombia, González, quien se ha presentado en hoteles y teatros de Las Vegas, apunta, pueden estar seguros de que la ‘ciudad que no duerme’ va a estar bien representada, expresa sonriente.
Siempre ecuánime, tranquilo, casi impasible, pero se desdobla al tocar, le pone mucha pasión, comenta “Chiqui” García, director de ‘Salsa con timba’, uno lo ve y no puede imaginarse que es un virtuoso del arpa, estudioso, con una carrera brillante, avalada por sus conciertos en los Latin Grammy (con Los Tres Grandes y la Quinta Estación), tocó en el Carnegie Hall, de Nueva York; en el Kennedy Center; el Scott Fitzgerald... ejecutar el arpa en Japón, apunta García, es como “bailar en casa del trompo”, y Mariano es un arpista con muchos premios y reconocimientos más que merecidos, afirma categórico.