Cuando la música es el límite... ‘Space to Pace’ con Puro V. Hernández

Por Roberto PELÁEZ

Tal y como se esperaba ‘Space to Pace’ es una agrupación musical que cada vez gana más seguidores en Las Vegas, y no solo porque son muchos los amantes de la salsa, la bachata, el merengue, también vale apuntar que los integrantes del grupo se entregan en cada presentación.

“Ya se sabe que en Casa Cigar estamos desde hace más de seis años, mucha gente va a vernos, la pasa bien, baila, escucha música, y no falta quien se enamora”, resalta el experimentado bajista Puro Vicente Hernández.

La calidad de ‘Space to Pace’ le abre puertas en diferentes escenarios; el pianista Rosendo Rodríguez, el percusionista Ángel Serrano, además del flautista Pablo Jorge Campos, la cantante Evelyn Martínez, junto a Hernández se presentan en diferentes lugares, “lo inundamos todo de música tradicional cubana, merengue, bachata... tratamos de complacer a todos, los bailadores quieren salsa, y tratamos de dar lo mejor, que la gente la pase bien”, comenta el bajista.

“Si usted baila, prosigue, pues tiene en nosotros a magníficos ‘cómplices’, le vamos a brindar lo mejor de nuestro repertorio, ahora también en Perú Chicken; y lo mejor es que nuestros seguidores van detrás del grupo, enseguida saben donde vamos a estar y van a bailar... es la eterna ‘batalla’ entre músicos y bailadores.

“Tratamos de hacer las cosas bien, significa el bajista, de complacer, dejar en la gente el deseo de volver, de invitar a sus amigos, y entre todos dar paso a la fiesta, divertirnos de manera sana y facilitarle la diversión a la gente”.

Oriundo de la que se considera la ‘patria chica de Benny Moré, Cienfuegos, al centro de Cuba, Puro advierte: “es muy importante para un artista dar lo mejor, estar a la altura de las exigencias de quienes acuden a las actividades, ser un profesional con todas las de la ley, y como señalé, dejar en todos el deseo de volver.

“Por otro lado, añade, tampoco es conveniente encasillarse, limitarse a un género, por eso incursionamos en la salsa, complacemos a los merengueros, a quienes piden bachatas, sin apartarnos de nuestro hilo conductor que es la música tradicional cubana, escuchada y aplaudida, admirada en todas partes, por eso no es extraño que se acerquen a pedirnos ‘Lágrimas negras’, ‘Guantanamera’, ‘Cómo fue’, ‘Aquellos ojos verdes’, ‘Quizás, quizás, quizás’, ‘Siguaraya’, y hay que estar listos para dar al bailador lo que desea, eso es lo que quiere bailar o escuchar”, reitera.

La platica gira en torno al acople que existe en el grupo, un elemento que incide en la calidad del ‘producto’ que brindan. “Nos conocemos hace mucho, por ejemplo con Rosendo llevo varios años, es muy profesional, Serrano también ha hecho sus cosas con nosotros, nos conocemos bien... es importante, dice, que la agrupación sea otra familia, que estemos compenetrados, con solo mirarnos ya sabemos  lo que viene”, asegura.

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