• ...si las personas no llegan a los libros, hay que llevárselos
Los libros son una herramienta poderosa para crear comunidad y generar cambios en nuestro entorno, ahí radica la importancia de generar estos espacios, refirieron gestores y promotores al participar en el conversatorio “Las mejores prácticas de fomento a la lectura en salas y libro clubes de la CDMX”.
Durante la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería (FILPM), Rogelio Estrada Pardo, responsable del Libro Club “Miravalle”, apuntó que la lectura es un derecho humano que se debe garantizar, y son precisamente estos lugares los que permiten llegar a un mayor número de personas, particularmente a los niños, niñas y jóvenes.
Indicó que las actividades de estos clubes permiten generan un diálogo entre la comunidad y participar de una reacción en cadena, ya que aunque muchas de las estrategias están dirigidas a los niños, se logra involucrar también a los padres y a toda la familia.
Viridiana Varilla, representante de la Sala de Lectura “Torres de papel” de Tlalpan, señaló que aunque a veces las condiciones del lugar y la falta de recursos pueden impactar su labor, es importante entender la relevancia social de los clubes de lectura, como espacios seguros y de convivencia mediante la lectura.
Explicó que en este club le ha enseñado que si la gente no lee, los animadores son quienes deben estar atentos a las necesidades de la comunidad, ser como cazadores y seducirlos, para llegar a generar puentes significativos con los libros.
En el evento participaron Rubén Israel Varilla, Raquel Martínez García y Marilina Barona. Los participantes concluyeron que la lectura puede ayudar a generar sociedades más justas, en espacios donde se promueva la libertad de expresión y el diálogo, para lo que es necesario la acción conjunta entre los diferentes agentes culturales y las instancias y programas públicos. México (NOTIMEX)
