Empezó la temporada para presentar la declaración de impuestos, y cuando muchos dudan si deben o les conviene “hacer sus taxes”.
Para empezar, nos guste o no el punto es que sí hay que hacerlo. Toda persona que tenga ingresos de dinero por empleo o por negocio debe hacer una declaración ante el Servicio de Rentas Internas, mejor conocido como IRS (Internal Revenue Service).
El comentario sobre el tema viene porque en la temporada de enero a abril, hay gente de nuestra comunidad hispana que todavía se pregunta si debe declarar sus impuestos o no. Duda porque gana en efectivo, porque no quiere pagar dinero cuando apenas le alcanza para sus gastos, o de plano porque no sabe nada de eso.
Puede haber muchas razones más de por qué una persona en condiciones de hacerlo no declara sus impuestos. Una de ellas puede ser el estatus migratorio irregular, la “falta de papeles”. Por temor o no encontrar quien asesore sin abusar.
Sea cual sea el pretexto, eso debe quedar atras y hacer la declaración. En otras palabras “haga sus taxes” ya, sin dudar y le damos algunas razones para hacerlo:
Es una obligación y tiene que cumplir tenga papeles o no. Cualquier persona con ingresos de empleo o negocio –como se apunta arriba— debe hacerlo. Si no cumple puede tener, tarde o temprano, multas y otras sanciones que a nadie le gustan ni le convienen.
Para el caso de quienes son indocumentados o piensan que no los toman en cuenta, hay que decirles que la declaración de impuestos es uno de los puntos ineludibles y obligatorios en una reforma migratoria. Si alguna vez quiere arreglar su estatus los impuestos saldrán a relucir siempre.
Pero no solo por conveniencia migratoria o por otros motivos hay que declarar. Como ya se dijo no pagar impuestos significa un delito y según sea el caso puede llegar hasta la cárcel.
Hay otras muchas razones aparte de la simple obligación. Vea usted: Según el caso el IRS le puede regresar dinero en lugar de tener que pagarle. Declarar los ingresos y pagar impuestos es parte sustancial de la estructura de una comunidad, de una nación.
Así como una familia se sostiene, funciona y avanza, una ciudad un país se sostienen y dan los servicios a su gente gracias a los recursos que obtienen con los impuestos.
La seguridad pública, los caminos, el alumbrado, todas las funciones de los gobiernos y hasta servicios de recreación como los parques e instalaciones deportivas se cubren con recursos provenientes de los impuestos.
Todas esas comodidades y servicios que se disfrutan se pagan directa o indirectamente con los impuestos que cada persona y empresa debemos tributar. Así entonces por el contrario de quienes no pagan impuestos, los que sí lo hacen –y es la mayoría— sienten orgullo de hacerlo y hasta tienen el respaldo de poder opinar o pedir cuentas de los asuntos públicos.
Deje la flojera, los malos consejos que a veces pretenden “ayudarle” para evadir pagar impuestos (este es un punto para comentar en otra ocasión) y ponga manos a la obra para hacer su declaración de impuestos este año. ¡Haga sus taxes y bien!
