Por Roberto PELÁEZ
El incansable Ismael Lagunas tiene una sala llena de trofeos y medallas... fruto de una extensa carrera como entrenador de futbol, sobre todo en las categorías infantiles.
“Usted ve todo eso, dice -y apunta hacias varias copas, placas y medallas- es importante, resulta el reconocimiento al trabajo, a largas horas bajo el sol, a los momentos buenos y malos, las alegrías y decepciones, significa.
“Sin embargo el mayor trofeo para mi es que cada jugador sea mañana un hombre y mujer de bien, un orgullo de su familia y de la comunidad, por eso siempre digo que hay que enseñar a los pequeños a jugar futbol, pero mejor aun, prepararlos para la vida”, asegura.
“No llevo la cuenta, resalta, de la cantidad de pequeñines que se acercaron a mi sin saber siquiera patear un balón, y ya muchos de ellos también tienen sus trofeos y medallas, saben jugar en equipo, que es algo muy distinto, sin individualismo, porque el futbol es un deporte colectivo, reitera.
“Muchos niños del equipo Inter United en Las Vegas Valley Soccer League, estuvieron en diferentes momentos en un torneo tan difícil como la Mayor’s Cup; se han visto en muchas finales, y están conmigo creo desde que tenían cuatro y cinco años, afirma, conozco a sus padres, a sus amiguitos, a sus seguidores, porque hay mucha gente que los viene a ver, que los aplaude... aprender a jugar partidos tensos también se aprende”, externa el experimentado acondicionador.
“Fíjese como ese niño lleva el balón, la técnica, el dominio que tiene, sus habilidades... hay jugadores con talento, opina, pero hay que encaminarlos, pulirlos, hablarles una y otra vez como un padre le habla a su hijo, unos captan rápido, otros demoran más y el técnico no puede cansarse”, reitera.
“Salen a relucir los nombres de Gilberto ‘Tomatito’ García, Yohan Díaz, Jonathan Domínguez, Ángel Brito, Ismael Lagunas (Junior), entre otros.
“Comenzaron conmigo, llevamos tiempo juntos, aman el futbol, les gusta ganar, pero me gusta más su disciplina, que respeten, escuchen, pongan interés, entonces los triunfos vienen, hace falta entrega, percatarse a tiempo de la estrategia de los equipos rivales y hacer valer la nuestra, apunta Lagunas, afortunadamente, sin que sea la mayoría, ya algunos técnicos trabajan así, priorizan la calidad humana de los jugadores... entonces llegan las medallas, los trofeos, porque el indisciplinado no puede ganar, es así de fácil”, precisa.
Dos padres se acercan a felicitarlo, también el abuelo de ‘Tomatito’... “muy bien técnico, se ve que el equipo mejora por días”, le expresan.
Lagunas retoma la plática para los lectores de El Mundo “Soy un hombre agradecido, subraya, le agradezco a Dios darme la posibilidad de conocer a estos niños, a sus padres, a los directivos de las ligas en que hemos estado, sobre todo Las Vegas Valley Soccer League, a los equipos contrarios que nos llevan a superarnos, a entrenar, nos motivan, y eso me alegra”, sostiene.