Por Roberto PELÁEZ
Lo habíamos advertido. Cuando se junta el empeño y el deseo de hacer bien las cosas, todo fructífica. Una vez más juntaron sus esfuerzos el Club Migrantes de Uruapan y Vista al Futuro con el marcado objetivo de agasajar a los más pequeños de casa.
Marychuy Escobedo y Eddie Ramos, volcados siempre en favor de la comunidad, ratificaron su vocación de servicios, su poder de convocatoria, el buen desempeño de sus respectivos equipos de trabajo... aunque justo es reconocer que ellos son literalmente una fuerza.
Centenares de niños acudieron al Walnut Park acompañados de sus padres, “nada se compara con la sonrisa de un niño, prodigarles algo que motive su alegría”, deja sentado Escobedo, quien de inmediato agradece al comisionado William McCurdy II el apoyo de siempre.
“Sin los patrocinadores (el abogado Rayan Alexander, La Bonita Super Market, La Unión de Carpinteros, Tortillería Los Arcos, Las Doñas Academy, La Comparsa Fiesta Morelense, el semanario El Mundo, entre tantos otros), hubiera sido más difícil, por eso llegue hasta cada uno de ellos -incluidos los artistas- nuestro AGRADECIMIENTO’, subrayó la conductora del gustado espacio radial Vista al Futuro.
A decir de los asistentes, resultó una actividad que denotó magnífica organización, trajo consigo la siempre anhelada alegría infantil, y con ella la de los padres.
“Tengo dos niños en casa y es difícil, se imagina esta cantidad, cientos de pequeños, sus padres, el público, además, sé por experiencia lo complejo que resulta organizar un evento, más aún de este tipo, los recursos, los artistas, hay que estar atento a todo, por eso admiro a quienes llevan a cabo actividades, movilizan a la comunidad, a los voluntarios”, comentó Lupe Arzuaga, oriunda de Michoacán, residente en las proximidades de Cheyenne y Civic Center.
Marychuy quiso extender también su agradecimiento a la incansable cantante Saray Loera, a la Payasita Rosita (contagió a todos con su entusiasmo y su manera de hacer), a la pinta caritas Jenny de la Vega, al grupo Folklórico Atlánxochitl, Latinas Musical...
Junto a la música, la comida, el entusiasmo, la diversión que por lo general caracteriza las actividades dedicadas a los niños, no podía faltar la entrega de juguetes a los pequeños.
“Se da cuenta, añadió Arzuaga, eso mismo de conseguir juguetes, estar atentos a que éstos alcancen para todos, también lleva trabajo, no sé si otros se dan cuenta de todo lo hay detrás de una actividad, las puertas que hay que tocar, y gracias que aparecen los patrocinadores y ayuda, pero hasta eso mismo lleva trabajo, ocupa tiempo que hay que dejar de hacer lo de una...”.
Al respecto es válido consignar que tanto a Escobedo como a Ramos los llena por dentro servir a la comunidad, sentirse útil, sin reparar en nacionalidades, más si se trata de los niños.
